La Dermatitis atópica también se llama Eczema atópico oEczema constitucional. Es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que cursa por brotes. Afectafundamentalmente a niños y adolescentes y con menor frecuencia a adultos. Su aparición se puede iniciar en los primeros años de vida, en la mayoría antes de los 5 años y a veces antes de los 6 meses (eczema del lactante) y en estos casos, puede remitir espontáneamente (entre los 2-3 años) o bien persistir en la adolescencia.
Dependiendo de la edad del paciente la localización de las lesiones es diferente, en general todos ellos tienen una piel muy seca y sufren picor intenso.
- En la época de lactante las zonas más frecuentemente afectadas son las mejillas, mentón, cuello, tronco y extremidades.
- En la edad infantil los eczemas aparecen de un modo muy característico, son bilaterales y simétricos, como por ejemplo, detrás de las dos orejas, alrededor de las comisuras de los labios, detrás de las dos rodillas, en las zonas de flexión de los codos, muñecas y manos.
- En la edad adolescente su localización más frecuente es en manos y zonas de flexión. En el adulto las lesiones se localizan predominantemente en cara, dorso de las manos y zonas de flexión de las extremidades.
Los pacientes con Dermatitis atópica con frecuencia también tienen otras enfermedades alérgicas, como asma o rinitis y suelen tener antecedentes familiares de alergia. Aún siendo una enfermedad con un sustrato alérgico, su causa se desconoce, pero sí sabemos que diversos factores pueden influir en su presentación, entre ellos, alergenos inhalados y alimentos.
Así es frecuente que estos pacientes tengan elevados en sangre los niveles de una proteína, la Inmunoglobulina IgE total y también la Inmunoglobulina IgE específica frente a diferentes alergenos (ácaros, pólenes, mohos.) y pruebas cutáneas positivas a dichos alergenos. En aquellos pacientes en los que se demuestre una implicación de estos alergenos en los episodios de dermatitis atópica, son necesarias medidas de control ambiental estrictas que irán asociadas a una mejoría del eczema.
Es importante investigar la tolerancia a alimentos de estos pacientes completando el estudio con pruebas cutáneas y determinaciones de IgE específica frente a alimentos. Para saber si realmente determinados alimentos pueden jugar un papel importante en la evolución de la dermatitis atópica, a veces tenemos que recurrir a dietas de eliminación y reintroducción, y comprobar de esta manera que existe una relación causa-efecto con las lesiones cutáneas. Tan solo ante la evidencia de positividad se decidirá la exclusión de dicho alimento de la dieta, sin embargo, se deben evitar dietas restrictivas indiscriminadas que conllevan una grave alteración de la calidad de vida del paciente y un riesgo de malnutrición.
Otros factores que pueden desencadenar brotes de dermatitis atópica son: las infecciones de la piel por bacterias, hongos o virus, irritantes como tejidos de lana, algunos jabones y desinfectantes, el sudor y el estrés.
Por todo ello, los pacientes con dermatitis atópica, deben tener en cuenta los siguientes consejos prácticos y normas de higiene, lo que les permitirá vivir mejor su afección:
- Utilizar ropa de algodón en contacto con la piel, evitar suavizantes y lejía.
- Evitar irritantes (lana, fibras sintéticas, ropa apretada, productos químicos, perfumes)
- Baños en agua templada (temperatura no superior a 32-33º C). Evitar el jabón
- Aplicar aceites, cremas o leches corporales después del baño sobre la piel húmeda
- Los baños de mar y de sol son muy recomendables, asegurar una correcta fotoprotección con una crema solar de alta protección. Evitar la sudoración
- Cortar las uñas y colocar guantes por la noche para evitar el rascado
- Evitar el estrés